martes, 27 de agosto de 2013

Aquellos días...



Solo en ocasiones, cuando era urgente traer los rollos de tela, el señor Carlos Fuller (hijo de Chabuca Granda) me ordenaba acompañarlo en su moderna camioneta azul 4x4 hasta la remota tintorería donde los rollos de tela cruda eran teñidos de blanco para la confección de polos de exportación. Partíamos desde la zona industrial cerca al viejo coliseo Amauta hasta una distante callejuela de la avenida Argentina. Yo, como copiloto, iba cómodamente sentado, ufano y distendido como un gato, mientras mi jefe sintonizaba una radio. 
Eran los últimos meses -¡interminables!- de un añejo partido que decía se quedaría 60 años en el poder. Ahí, sentado, disfrutando a placer del equipo de sonido de la camioneta, arrullado por la canción, me hallaba dentro de una frágil burbuja, una burbuja que me mantenía alejado  no solo del frío invernal de la época sino también de muchas cosas que un chico de 18 años apenas intuye: el siempre volátil valor del inti, la escasez de alimentos y los paquetazos, el terrorismo y los apagones, y la corrupción pestilente de un gobierno que nos enrumbaba a la nada.
"Estar solo es la mejor manera de estar" canta en un momento de la canción la bella Eddie Brickell, así era. Mi jefe, el señor Carlos Fuller, jamás iniciaba, ni intentaba conversación. Era yo y la canción. Conocía ya la melodía pero la acústica de la camioneta realzaban el bajo y la voz de la cantante; no era la camioneta quien me llevaba sino la música de este quinteto The new bohemians: era consciente de cada acorde, de cada golpe de batería, de cada inflexión  de la voz de la cantante, en fin, de cada instrumento que, ahora, con la acústica propicia, se me revelaban y me hacían redescubrir la canción.
Lástima, el tema duraba apenas unos tres minutos, "todo es temporal de cualquier modo", pero los ecos de la misma perduraban durante el trayecto así como las sensaciones de bienestar que la canción había desovillado en mi. En otro pasaje de la canción dice: "es hora de tocar tierra"; el trayecto llegaba a su fin, muchos rollos de tela esperaban..."cuando las calles están húmedas los colores resbalan hasta el cielo".
Años después volví a ver al señor Fuller, lo vi volantear por el centro de Lima: pensaba lanzarse al congreso aquel año 2000. Me contó, siempre con ese aire irlandés rudo y amable, como el fujimorismo había destruido la industria textil, y la fábrica de confecciones en la cual laboré por primera vez ya no existía más.  No logró un escaño, pero seguro tuvo la satisfacción de ver desmoronarse ese andamiaje corrupto y mafioso creado por Fujimori y su banda de pillos...

Halalalalala !!!!

Letra de la canción: Circle